2012年7月19日木曜日



Eran cadenas las que me mantenian cautivo a tu merced, cadenas blancas de pasión y demencia, de adicción y dolencia.

Ni siquiera era amor, porque ese sentir en mi había muerto ante el umbral del cielo, ¿Entonces cariño?, ¿Qué era lo que me habías hecho?, ¿Es nigromancia alada la que has infundido en mis pupilas? Porque no me explico tan ciega y burda adoración, que me embeleses con tus labios, que me ahogues con tu voz; No me explico tanta locura indigna, tanta infame pasión.

Si te arrebataran de mi lado, perdería todo resquicio en mi de conciencia, de cordura, de prudencia; Si te arrebataran de mi lado, moriría ahogado al instante en la más vulgar vehemencia.

Y que tu Dios me condene más de lo que ya lo ha hecho.. que el infierno me consuma, que la locura en mi corazón impere y se infunda, pero olvidarte simplemente no puedo.. no podría nunca.


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