6 de abril de 1904
El sólo pensamiento de dejar este mundo, era un tormento. El olvidar mis sueños y anhelos, olvidar quien era yo tan sólo por escuchar su interminable voz, causaba el más desquisiable temor en mi, porque ya no era nada, no era nadie, estaba abandonado, toda mi humanidad había sido tirada y maltratada, todo por escuchar sus palabras atormentando mi razón.Ya no había consuelo para mi alma desvariante, sólo una pequeña esperanza que me mantenía aún de pie, un deseo irremediable y absurdo, diría yo que hasta un poco suicida, pero ¿qué más daba?, no tenía nada.. sólo a él.
Tanto tiempo encerrado en aquel lugar, tanto tiempo ahogado en sus embriagante besos descuidados, encadenado a su cuerpo y a sus preciosas palabras contaminadas de mentiras, tanto tiempo intoxicado por la pasión y la obsesión que me causaba, por el falso querer hipócrita que me predicaba día a día como una indecente plegaría, no podía escapar de su encanto natural.
Lo sabía, había muerto hace tanto tiempo..
él me había matado.
él me había matado.
Pero fue en ese momento, en ese precioso instante en el que tú por primera vez en la vida murmuraste mi nombre, que yo volví a nacer.
Ah, tu voz.. tu voz arrulla todo mi desasosiego y mis frustradas emociones, tu voz suprime en mi toda debilidad, me hace vislumbrar el universo y su eternidad, tu voz calma todo motivo de locura y demencia que él allá causado en mi antes, y tu mirada siempre grata y apacible, borra todo resquicio de culpa e incertidumbre en mi.
Dices mi nombre, volteo.. "¿quién?" Y al sentir tu abrazo, todo es claro otra vez, recuerdo porque estoy aquí, porque he nacido y a donde voy, al escuchar tus palabras recuerdo algo que él me hizo olvidar por tanto tiempo, quién en verdad soy.
Tú curas mi alma y mi corazón,
¿debería buscar para amarte otra razón?
¿debería buscar para amarte otra razón?
★ El sólo pensamiento de dejar este mundo antes de tiempo,
ya era un tormento..
0 件のコメント:
コメントを投稿