18 de Octubre de 1893
Todo era por ti, los dulces pasos del arrepentimiento, el febril deseo, todo desembocaba en tu nombre y tu recuerdo. Oh mi amor, ¿cuánto he vivido ya sin recibir tu consuelo?, ¿cuánto más estaré atrapada en este infierno? este infierno donde tú no existes y jamás me hablas, donde las horas de mi vida se destiñen en la eternidad del tiempo, en la melancolía de mis sueños, en el saber que al igual que mi infancia, tú nunca volverás a mi encuentro.. Ah, mi amor, me duele cada segundo que no te tengo, y muero, porque sin ti mi existencia ya no puede más, mis pasiones perecieron al igual que tú y tus palabras, y hoy que no te tengo, sólo puedo en delirios pensar.
¿Qué no lo ves? todo era por ti, mis deseos al despertar, mis razones para olvidar, tú eras mi todo, mi eternidad..
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