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Creer,

¿Para qué? Si sólo es cuestión de tiempo para que ella venga y me diga al igual que siempre, ‘‘Todo es mentira’’

Odio esta ambivalencia, Dios mío, ¿quién es? ¿qué quiere?

Se sienta frente mío y con su rostro bonito, fija su mirada, acribillando mi mente de tantos pensamientos, que me hez imposible conciliar el sueño,

Guarda silencio, por favor, no me inundes más de resentimientos, hacia mí y hacia ellos, que ya no quiero creer ni acordarme, de nada ni de nadie,

‘‘Somos dos bailando, entre reproches y halagos, entre mentiras y engaños,’’

Perdimos la esperanza, un día de tantos del mes de marzo,


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